Durante el confinamiento, ¿has notado que ves peor y en general, sientes tus ojos más cansados?
Si consultamos las estadísticas de tiempo de uso de nuestros dispositivos móviles en los últimos dos meses, encontramos un incremento significativo con respecto al periodo anterior al confinamiento. El cambio en nuestros hábitos ha desencadenado que, tanto las actividades de ocio, el estudio o el trabajo nos mantengan más horas de lo habitual frente a pantallas.
No es nada nuevo, y así lo demuestran numerosos estudios, que el exceso de trabajo de cerca en tareas como leer, estudiar o usar dispositivos electrónicos como tablet, móvil u ordenador puede aumentar la miopía en niños y adolescentes (Ip et al., 2008; Lee et al., 2015; Guo et al., 2016; Gwiazda et al., 2004). Al mismo tiempo, el “síndrome visual informático” afecta a personas menos jóvenes e incluso adultos, manifestándose otros síntomas como fatiga visual o sequedad ocular e irritación por el sobre uso de dichos dispositivos.
¿Qué es la miopía?
La miopía es el defecto o anomalía del ojo que produce una visión borrosa o poco nítida de los objetos lejanos. Este problema de visión es cada vez más frecuente en la población y su prevalencia está experimentando un considerable aumento en todo el mundo. De hecho, estudios realizados en la población universitaria (Foster y Jiang, 2014; Lin et al., 2004; Williams et al., 2015), revelan que más del 80% de los estudiantes del este de Asia son actualmente miopes, afectando en Europa el 50% de los adultos jóvenes; tasa que se ha incrementado en la última década afectando a 6 de cada 10 (62,5%). Asimismo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) prevé que en 2050 la mitad de la población sea miope.
¿Cómo está afectando el confinamiento a nuestra salud visual?
Cómo decíamos al principio, durante la primera semana del confinamiento se incrementó el uso de WhatsApp un 61,1%, las vídeo llamadas un 45,1% y el uso de plataformas de reuniones online un 63,2%. Adicionalmente a este uso excesivo de pantallas y/o al aumento de actividades en visión cercana, así como a un estilo de vida más sedentario, debemos tener en cuenta otro factor de riesgo en la aparición y progresión de la miopía y que puede tener consecuencias en salud visual, que es la falta de exposición al aire libre y a la luz natural (Xiong et al., 2017b; Wu et al., 2018; Wu et al., 2013).
El COVID-19 o coronavirus ha provocado que estemos confinados en casa y que dediquemos mucho menos tiempo a tareas de visión lejana (jugar en los parques, practicar deportes en espacios abiertos, desplazarnos a nuestro lugar de estudio o trabajo) y estar prácticamente privados de exposición al aire libre y de la luz natural.
Toda esta situación actual está estrechamente relacionada con que haya mayor incidencia de la miopía en poblaciones urbanas comparado con poblaciones rurales. Además, si nos detenemos en un estudio concreto y muy actual, publicado en marzo 2020 (ver estudio completo) y realizado en Rotterdam (Holanda) con 5074 niños, podemos ver una clara analogía con la situación de confinamiento actual. En dicho estudio se recogieron datos en niños con edades a los 3, 6 y 9 años y lo que valoraron fue el tiempo de uso de ordenador, de lectura y tiempo al aire libre. Las conclusiones principales a las que han llegado son que el uso de ordenador, especialmente a muy temprana edad, está moderadamente asociada con el desarrollo de miopía en la infancia. Sin embargo, el tiempo de lectura tuvo una relación con la miopía, posiblemente porque se trate de una distancia de trabajo más cercana (en el estudio no valoraron el uso de dispositivos manuales como móvil o tablet, con distancia de lectura menor). El efecto de las actividades combinadas en el trabajo de cerca podría reducirse mediante la exposición al aire libre, lo que se puede observar en la gráfica inferior.
Por todo ello, cabe pensar que, a muchas personas, sobre todo niños, les podría aumentar su miopía o incluso aparecer dicho defecto refractivo en el periodo de la cuarentena, por lo que verían peor de lejos y al mismo tiempo padecer fatiga visual, dolor de cabeza y/o molestias relacionadas con la sequedad ocular (como picor o escozor de ojos), tras pasar muchas horas delante de estos dispositivos y sin salir de casa.
Pero la preocupación más importante a nivel ocular radica en identificar y tratar esas posibles miopías para evitar que progresen, ya que miopías por encima de 5 dioptrías se consideran patológicas y el riesgo de sufrir alguna enfermedad ocular y otras complicaciones (como maculopatía miópica, glaucoma o desprendimiento de retina, entre otras) es mucho mayor.
Según algunos expertos, el periodo que a priori viviremos de cuarentena podría no ser suficiente tiempo como para provocar ese cambio ocular en la población, principalmente pediátrica, pero como profesionales sanitarios de la visión creemos que es fundamental prevenir y tomar unas pautas, que pueden ayudar a aliviar esos síntomas iniciales durante el confinamiento, y que describimos a continuación.
Recomendaciones y consejos para evitar fatiga o estrés visual y posible aparición o progresión de la miopía:
- Sustituir el uso de dispositivos pequeños (móvil o Tablet) por pantallas grandes a una distancia mínima de 3 metros.
- Uso de lágrima artificial si hubiese sensación de irritación o sequedad en los ojos.
- Incrementar la frecuencia del parpadeo para humedecer los ojos. Sabemos que, con el uso de dispositivos, se reduce en 1/3 dicha frecuencia y lo ideal sería parpadear cada 4 o 5 segundos para evitar que la lágrima natural se evapore del ojo y haya mayor sequedad ocular.
- Aplicar la regla de los 20-20-20: cada 20 minutos de enfoque de cerca, mirar un objeto que esté a una distancia de 20 pies (6 metros) durante al menos 20 segundos.
- Mantener una posición adecuada en la silla (espalda recta y pies apoyados en el suelo) y tener una distancia respecto a la pantalla durante el trabajo de cerca.
- Teletrabajar en un lugar con buena iluminación y a ser posible con luz natural, en un espacio donde no haya reflejos de otros objetos.
- Usar filtros de protección de pantallas para disminuir la radiación y el brillo de éstas.
Si consideras que están sintiendo en las últimas semanas algunos de estos síntomas descritos o un empeoramiento en tu visión de lejos, deberías acudir a un profesional de la visión. Desde COVER Optometría podemos ayudarte a mejorar tu salud visual y a evitar una posible aparición o progresión de tu miopía mediante tratamientos especializados y contrastados científicamente. Estaremos encantados de poder ayudarte.